Empieza la clase de Matemáticas y, nada más comenzar, el profesor plantea un problema, una cuestión a resolver. A partir de ahí se inicia un proceso de reflexión individual, y en equipo; para buscar una posible solución, y una verbalización compartida, del razonamiento que ha conducido a esa conclusión.
Puede haber infinitas maneras de llegar a un resultado.
Lo importante es el proceso, el razonamiento, verbalizar el pensamiento propio y escuchar el de los demás, para que el niño comprenda de una manera natural, personal y significativa.
Ese es el detonante de una nueva forma de aprender.
Se prima la reflexión y el pensamiento crítico del alumno frente a la memorización o la repetición de operaciones.
Así lo refrenda el Dr. Yean Ban Har (Penang, 1968):
“La manera de enseñar matemáticas se ha vuelto antinatural para la mente humana. No implica interacción, no implica exploración ni discusión, y eso causa un problema. Esas habilidades de comunicar, colaborar con otros, de pensamiento crítico y creatividad a la hora de resolver problemas, son habilidades que ayudarán a los alumnos en su día a día”.
El eje de la metodología es cambiar el concepto de buenos o malos resultados.
“Se puede llegar a la misma solución por distintos caminos, sin repetir ni memorizar una única vía como hacen en las aulas de medio mundo”, manifiesta.
Las aulas empiezan a conseguir resultados
A nivel mundial, son muchos los centros que trabajan con esta metodología: una solución educativa que supone una profunda transformación en la organización y en el método de aprendizaje.
El profesor cambia su rol tradicional para convertirse en un dinamizador.
El protagonismo lo ocupan la experiencia, el diálogo y la práctica activa de los alumnos. Y están empezando a experimentar resultados positivos, según manifiestan los profesores, destacando especialmente la mejora de la motivación, la comprensión y la participación en una de las asignaturas que más dificultades suele generar en los alumnos.
Autor: El Dr. Yean Ban Har, referente internacional en la metodología que encabeza los resultados de PISA y TIMSS.